¿Podremos sus nombres pronunciar?
¿Acaso rehacer sus pasos?
Cada paso se convierte
En un sonido atronador
Un eco espectral
Un grito desgarrador
Un sonido como suspiro
Una imagen que se desgasta
Una palabra aprisionada
Un golpe
Un ruido silencioso
Tú que cargas su memoria
Que construyes con ello un recuerdo
Excúsame por usar mis palabras
Para construir un camino de susurros
Que permitan hablarles a otros
Desde la frustración que el silencio
Ha venido construyendo en mi interior
Creer saberlo todo mientras dejamos el periódico
Leyendo columnas que describen lo sucedido
Como una postal que resume un instante
Ignorando lo que se extiende más allá del marco
La tinta terminará degastada con el tiempo
Mientras la palabra hecha suspiro
Continuará viajando en el viento que esa noche
Les permitió escuchar a todos los testigos
Los atronadores sonidos que expulsaba la vitrola
El cielo vela por su reposo
Sus cuerpos hablan desde la sombra
Los ojos mudos
Los labios resquebrajados
Como las hojas que caen sobre el campo
¿En qué momento la espesura nos permitirá ver
a los espectros invocados?
En cada palabra, entonces, que no decimos, en cada mirada, en cada poema o línea que podamos escribir, está o no que aquellos que nos
antecedieron tengan la oportunidad de una vida nueva.
Raúl Zurita, Ensayos reunidos.
Como apagar el atronador sonido
Que se emite en tiempo discontinuo
Voracidad de la noche
Epitafio de las horas aciagas
Compañera de murmullos y silencios
Repetir rezos hasta desfigurarlos
Ver fantasmas en el borde de un abismo
El suelo aún está caliente
Cada paso en la ceniza
Es un recordatorio a la memoria
Sujetar su mano
No soltarla a pesar de las circunstancias
Exalar bocanadas de aire
Frente la espesura de la dificultad
Priorizar las imágenes que cruzan la mente
Acciones inconscientes ante la voracidad
Ojos secos ante el humo
Lagrimas que no logran salir
Los sonidos continúan en el espacio
Imposible apagar el ruido y el rugido
Repetir rezos hasta desfigurarlos
Repetir nombres para no olvidarlos
Repetir no debería ser una suplica
Escuchar es ser tocado a distancia.
Pascal Quinard, El odio a la música

PURGATORIO
GESTO
El sonido nos toca a todos por igual, nos hace sentir inmersos en el evento, nos transporta, nos convertimos en testigos desde la distancia, si cerramos nuestros ojos podremos sentir que aquellos sonidos provienen de nuestro entorno más próximo, no muy lejos de nuestra ubicación. El sonido se convierte poco a poco en una narración palpable. Encadena tonos y frecuencias que suscitan mucho más que aquello que el ojo podría captar, la escucha se convierte en una nueva forma de leer, los sonidos se convierten en una secuencia de marcas que se revelan desde la grieta de la superficie.
Operando bajo la lógica de la transducción, el registro fotográfico se transforma en un sistema de escritura musical adaptado al membranófono de percusión. La superficie y su inscripción permiten invocar al espectro, dando inicio a una conversación opresora y angustiante que revela nuevas voces y permite nuevas narraciones.
La composición musical se encuentra dividida en tres secciones, una primera sección titulada Aparición, reúne las cuatro cintas superiores de la imagen (edificio). La segunda sección titulada Conversación reúne las tres cintas del medio de la imagen (salida de cuerpos del edificio) y una tercera sección titulada Partida reúne las cintas finales (el señor de las palomas). La composición final, permite la activación de una acción performativa en la Plaza de Bolívar, que busca invocar a los espectros del evento en medio de la ausencia.
El gesto se convierte en el elemento más representativo del Purgatorio. Un gesto que busca desmontar los registros y excavar para llegar a los ruidosos márgenes de la inscripción.
A lo mejor él sí sabe lo que pasa ahí pero no le importa, porque la toma por el M-19, la retoma por el ejército, y una noche viendo arder el Palacio de Justicia, no son motivos suficientes para dejar de hacer lo suyo, seguir su propia vida, la de darle de comer todos los días a las palomas.
Ana Maria Ruíz, El señor de las palomas, Semana
¿Qué nos deparará esa inscripción?
¿Qué nos mostrarán y por ende qué nos narrará desde ese ejercicio de cortar y pegar?
¿Qué se ocultará y que desaparecerá?



